Flores por El Cordal, Asturias
Cuando la niebla impide disfrutar del paisaje y del horizonte queda pasear fijándose en lo cercano. Dando un pequeño paseo por el Alto del Cordal encontré un verdadero universo en miniatura.
Abejas y otros insectos disfrutando de mil flores, del brezo o del espino. Arañas albinas que parecen atrapas dentro de la flor del cardo. Flores minúsculas que al verlas por el visor del macro puedes apreciar toda su belleza.
Colores y aromas se encargan de llamar la atención de los insectos varios y también de quienes viajamos despacio. Los senderos guardan, a ambos lados, la riqueza de lo diminuto, de lo que pasa desapercibido. Unas vidas minúsculas que son en sí mismas MAYÚSCULAS. Felices rutas
