Destino Suiza (agosto 2002)
A la mañana siguiente y tras habernos caído durante la noche el GRAN diluvio, el día amaneció gris, estaba muy nublado y pusimos rumbo al Valle de Aosta, decidimos que Chamonix se merecía una visita con mejor tiempo.
Una vez en carretera nos adentramos en el Tunel del Mont Blanc, el trayecto nos cuesta 33 euros y la verdad, estar tan cerca en el tiempo del accidente de 1999 nos hace que los casi doce kilómetros que separan Chamonix de Courmayeur se nos hagan eternos. La verdad, es que ha quedado genial en su reapertura pero, sentimos un nudo en la garganta acordándonos de las víctimas, fueron mas de 40 muertos. El túnel del Mont Blanc es uno de los primeros túneles que ponen Radar por trayecto, esto es, calculan el tiempo que necesita determinado vehículo para hacer ese trayecto y si se tarda menos ¡ZASCA!, te ponen la multa.
Una vez atravesado el túnel nos dirigimos hacia el Passo del Gran San Bernardo y lo hacemos por el Valle de Aosta.
Subir el Gran San Bernardo por esta vertiente es un lujo, llegas a la cumbre que se encuentra a 2473 metros y solo se puede hacer entre mayo y octubre el restos de meses este Passo que une la ciudad italiana de Aosta con la suiza de Martigny está cerrado por las fuertes nevadas. En lo alto del puerto los monjes que allí viven tienen un criadero de perros San Bernardos. El desnivel medio por esta vertiente es del 11% Asi pues cuidado y a disfrutar.
Hasta llegar a Martigny hemos recorrido casi 500 kilometros y vamos directos al área de autocaravanas.
Al levantarnos nos ponemos en ruta y nos incorporamos a la autopista A9 y nos desviamos hacia Täsch y vamos directos al camping que lleva el nombre de la localidad, no tiene perdida porque está situado junto a la estación de trenes que suben a Zermatt y por cierto, no está vallado. Nos instalamos y vemos las tarifas 50 francos suizos/dia. El dueño hablaba perfectamente español y estaba realizando una magnifica maqueta de los Alpes. Después de comer y dar una vuelta grande a nuestro perro Tejo (un precioso gos d’atura català) nos cogemos las bicis y nos vamos a Zermatt, la carretera tiene un firme horrible y aunque las cuestas son duras, al menos dos de ellas, es recomendable el paseo. En Zermatt está prohibido el uso del coche, solo se puede acceder andando, en bicicleta, en tren cremallera. En la localidad alpina circulan coches de caballos y también coches eléctricos. Pero, esta pequeña ciudad bien merece tomarse en ella un café.
Zermat y el Cervino al fondo
Paseo en bicicleta por Zermat
Taxis en Zermat
Era primeros de agosto y hacia mucho frío. Paseamos por el pueblo y disfrutamos de sus rincones hasta que el mal tiempo nos obliga a coger la bici y volver a Täsch.
El camping es tranquilo y pronto se hace el silencio, hay muchos montañeros que están preparando sus mochilas para salir temprano hacia Zermatt.
Al día siguiente decidimos volver y esta vez lo hacemos en el tren cremallera, el precio por persona es 15,60 francos y los perros 7,80.
Esta vez nos acompaña nuestro perro y vamos a dedicarle el día a Zermatt, queremos disfrutar de su paisaje producto de su altitud porque esta situada a 1620 metros, y a los pies del majestuoso Cervino. Al igual que el día anterior el tiempo cambia casi de repente y aunque parecía que el sol iba a hacer acto de presencia la realidad es que el día termina por estropearse del todo. Eso si no hemos dejado de visitar el cementerio de los montañeros en el centro de la población.
Después de dos días en Täsch y viendo la predicción del tiempo que no mejora en días decidimos que no vamos a esperar para subir al teleférico más alto de Europa a 3.820m, lo dejaremos para un próximo viaje.
Nos ponemos en ruta hacia Saas Fee, según llegamos vemos el desvío hacia el area de autocaravanas que está situada con vistas al glaciar Saas Fee. Un lujo.
Si tienes la tarjeta de turista logras un 50 % de descuento en el precio del área, la puedes conseguir en la oficina de turismo.
Es increíble ver las vistas que se tienen del glaciar desde el pueblo.
Nuestro perro disfruto y mucho en este pueblo y nosotros con el, visitándolo en bici y recorriendo sus rincones. Pasamos una noche fantástica rodeados de tanta naturaleza y belleza.
En bicicleta con el glaciar Saas Fee al fondo
Saas Fee
Grimselpass
Grimselpass
Area de autocaravanas de Lauterbaunne
Fotos de la Jungfaujoch:
Al llegar a Lucerna aparcamos junto al Lago de los 4 Cantones, cogemos las bicis y nos vamos a ver la ciudad. Llueve y llueve pero que le vamos a hacer estamos en Suiza por eso todo es tan verde, o no? Lo que no entendí es como Ruben se acordaba de donde habíamos aparcado nuestras bicicletas. Había miles por toda la ciudad.
Aparcamientos bicicletas Lucerna
Emblemático puente de Lucerna.
Imagino que si el tiempo hubiese sido otro, nos hubiésemos quedado en Lucerna a pernoctar pero no lo hicimos, decidimos que nos vamos hacia St Moriz. volvemos por la misma ruta que nos llevo a Lucerna pero nos desviamos hacia Wassen y pasamos por el Sustenpass a 2.224 metros de altitud. No podemos admirar la belleza de la cumbre porque el frío, el viento y la lluvia nos lo impiden. Está siendo un viaje pasado por agua, menos mal que el día que subimos a la Jungfraujoch hizo sol. Al pasar por la población de Andermatt decidimos parar, la lluvia era ya muy fuerte y la niebla era cada vez mas intensa hasta el punto de no ver a dos metros de nosotros.
Entramos en el camping Gotthard, bueno lo de entrar es un eufemismo, el camping no deja de ser una campa con una cinta de plástico que delimita el sitio. Y servicios de camping, los aseos de un teleférico y poco mas. Al menos estaba llano, que ya era algo, la altitud a la que se encuentra, 1.444 metros nos hacia pensar que haría menos viento que en la cumbre del Sustenpass pero no era cierto. Pasar la noche en ese prado llamado camping, junto a las cabinas de un teleférico nos costo 26 francos. Una vez entramos a la caseta de obras que hacia las veces de recepción sabia que la cosa no iba a terminar muy bien. La mujer que nos atendió nos dio la tarifa. En ella se incluían 3 francos por simplemente estar. Después de mucho discutir con ella cedimos y pagamos los 26 francos. _ 2 por electricidad, 12 por dos personas, 9 por la autocaravana y 3 por que ella lo valía. Quiero pensar que el lugar lo merecería, nosotros no pudimos ver nada a la llegada, ni nada al día siguiente cuando decidimos partir. La lluvia y el viento nos había acompañado toda la noche. Al levantarnos y tras un largo paseo con Tejo nos decidimos por seguir ruta.
Pagas, si o si. camping Gotthard
Nuestra ruta hoy nos lleva esta vez a pasar por el Oberalpass, con la cima a 2046 metros de altitud. Imposible hacer fotos, la espesa niebla nos acompaña en la subida y el descenso. Al llegar a Chur decidimos atajar para llegar a nuestro próximo destino que era St. Moritz. ERROR! Esa carretera nos llevo por el puerto de Albulapass a 2315 metros de altitud, comenzamos a pensar que nos habíamos equivocado de año al visitar Suiza. Incluso encontramos nieve. El puerto de Juliarpass a 2.284 metros, al menos, nos deja que fotografiemos el cartel, tal y como hicimos en Sustenpass. En el descenso nos encontramos una autocaravana la única con la que nos cruzamos en todo el día.
Al llegar a St. Moritz nos espera más lluvia, que de vez en cuando nos da un respiro.
St. Moritz
St. Moritz, al mal tiempo buena cara
St. Moritz
Después del paseo con nuestro perro nos fuimos a buscar donde se realizaba al día siguiente una competición de agility. Nos acercamos y preguntamos si se puede participar y al decirnos que si, hacemos la inscripción para el día siguiente. Tejo no se espera la alegría que va a tener cuando se encuentre con una pista de agility. Pasamos una noche con viento y lluvia, y nos tuvimos que levantar a poner la calefacción. Al levantarnos al día siguiente descubrimos que todas las cumbres que rodean St. Moritz estan nevadas. Todo está montado para un día de competición. Hay muchos competidores italianos y alemanes y nos resulto muy fácil todo porque nos ayudaron desde la organización. Eso si, Tejo se elimino ambas mangas.
Agility en St. Moritz
Agility en St. Moritz
Después de dos días en St Moritz damos por finalizado nuestra ruta por Suiza.
Nuestra idea era haber disfrutado mas en algunos de los lugares visitados pero la lluvia no nos ha dado tregua, aun asi nos llevamos un grato recuerdo de este pais Alpino.
Nos ponemos rumbo a Austria queremos visitar Innsbruck, para llegar pasamos por el túnel Arlberg, es un túnel de mas de 10 kilómetros y transcurre en paralelo al túnel que da servicio al tren, pasar por el nos costo 8,50 euros, es uno de los mas extraordinarios túneles del mundo.
túneles de Arlberg, trenes y coches
Entramos a Innsbruck por la autopista E60 ó A12, enseguida encontramos la estación y como ya es tarde decidimos aparcar y ver si había alguna prohibición de autocaravanas. Según paseábamos a Tejo vimos como entraban 4 autocaravanas italianas que aparcan muy pegados a nosotros y al no ver nosotros senal decidimos que era buen sitio para pasar la noche.
Cuando con los años hemos vuelto a esta ciudad hemos aparcado en el camping de Innsbruck pero, ese año nos apañamos bien de esa forma. Aun así, al día siguiente y puesto que llueve mucho decidimos movernos y acércanos al centro histórico. como no, nuestro primer objetivo es ver el famoso Tejadito de Oro, lo vimos coronar por encima de un mar de paraguas, era un día horrible, lluvia y mas lluvia. No dejéis de visitar el Palacio Imperial o la Torre de la Ciudad que durante años sirvió para anunciar a los vecinos peligros como incendios, ataques enemigos o tormentas. También da gusto visitar el trampolín de saltos de Bergise.
Perderse por sus calles, ver sus comercios, algunos dedicados a elementos decorativos de la navidad, da lo mismo que sea agosto. Y si podéis compraros un buen sombrero de fieltro austriaco fabricado en Innsbruck, por mucho que llueva JAMAS os mojareis la cabeza.
También podéis visitar la ciudad con el Sightseer Innsbruck, el autobús turístico de Innsbruck.
Y como en muchas ciudades si vais a estar mas de un día o dos sacar la Innsbruck Card, con ella además de estar incluido el autobús turístico, tenéis también la posibilidad de subir a los funiculares y entrada a los museos o lugares de interés.
Insbruck
Tejadito de oro Insbruck
Insbruck
Insbruck
Llevamos ya días fuera de España y no nos parece normal tantos días de lluvia seguida o, pudiera ser que hubiésemos tenido mala suerte con la elección de los días de vacaciones, lo que es cierto es que el río Inn, a su paso por esta ciudad , lleva mucho caudal y tiene un color de agua muy turbio, fruto de muchas precipitaciones.
El primer pueblo que vistamos en Baviera es Mittemwaled, después de pasar por una carretera con desniveles del 15%. Esta pequeña ciudad junto con la de Oberanmergau son un museo de pinturas murales al aire libre. Sus casas decoradas con frescos que datan del siglo XVIII son una autentica maravilla. De esta localidad son famosos sus violines, violonchelos y violas.
Y, como era de esperar llovía y llovía. Después de hacer un recorrido por sus calles y ver como sus habitantes son autentico guardianes de sus tradiciones decidimos avanzar. El día no esta para muchos paseos.
Avanzamos no mas de 20 kilómetros y decidimos hacer la parada que teníamos planeada en Garmisch-Partenkirchen. Como no, lo primero es visitar las Instalaciones olímpicas, los saltos de Año Nuevo que vemos en la TV cada año en la rampa de saltos de esquí más moderna del mundo.
Garmisch-Partenkirchen.
Aprovechamos para hacer algunas compras de ropa deportiva de invierno, sus comercios son increíbles. Si tenéis mas suerte que nosotros con el tiempo podréis visitar Zugspitze, el pico más alto de Alemania, a cuya cima a 2.962 m se puede acceder en tren cremallera y teleférico. Una pena que a nosotros nos lloviera y nos lloviera.
Nos vamos hacia nuestro destino de pernocta, Oberanmergau. Aparcamos junto al río Ammer y decidimos que es un buen sitio para pasar la noche y para que nuestro perro disfrute un poco. Nos sorprende sobre manera el gran caudal que lleva el río y, aunque es la primera vez que visitamos Baviera, no creemos que sea algo muy normal.
Pasamos una noche genial y la lluvia parecía que era menos intensa. Al despertarnos hicimos un recorrido mas detallado para ver sus casas pintadas. Aquí os dejo unas pocos fotos a modo de aperitivo de las fachadas que podréis ver.
Oberanmergau
Oberanmergau
Oberanmergau
Tenemos intención de pasar otro día mas por si podemos volver Garmisch-Partenkirchen y el tiempo nos permite subir al Zugspitze pero, una llamada de nuestro buen amigo Pepiño, conocido por muchos autocaravanistas por sus relatos que firma como Pepe Hermoso, nos alerto, nos preguntos por donde andábamos. El sabia que esta zona de Baviera la teníamos en la ruta.
Al decirle que nos encontramos en Oberanmergau y que estamos aparcados junto al río nos dice que nos vallamos. Nos alerta de la situación que se está viviendo en Centro Europa con los desbordamientos de la cuenca del Danubio y el Elba. Y claro, no lo dudamos, nos vamos hacia la autocaravana y mientras caminábamos íbamos atando cabos. No era normal la cantidad de agua que nos había caído los días anteriores. Los ríos los vimos como mucho caudal como apreciamos en Innsbruck.
Tejo, se lo había pasado genial en su paseo, allí coincidimos con varios alemanes que conocían la raza de Gos d’atura català y le acariciaron y mimaron con galletas.
Esta claro que tenemos que improvisar sobre la marcha pero nos gustaría tener mas noticias aunque no entendemos nada de lo que se dice en las noticias de la TV que vemos desde un bar y, no logramos prensa en castellano.
Ponemos rumbo a Linderhof, no conseguimos llegar a unos cinco kilómetros tenemos que darnos media vuelta vemos que el rio lleva el máximo de caudal y esta desbordándose en algunos tramos de la carretera. Realmente estamos muy alarmados, con los dias supimos que solo en Alemania hubo mas de 30 muertos en la zona de Baviera. Estas inundaciones destrozaron pueblos y comarcas enteras.
Hacia Linderhof
Hacia Linderhof
Variamos nuestra ruta sobre la marcha y nos vamos hacia Füssen, buscamos el área de autocaravanas, que por cierto es para ponerla una nota muy alta (Wohnmobilplatz Füssen). Está situada frente a un pequeño centro comercial cuyo principal comercio es LIDL.
El coste es de 10 euros noche por autocaravana. El área cuenta con una zona de lavandería lo que nos viene ideal, tenemos que hacer colada y además aprovechamos la tarde para reponer provisiones, pasear con Tejo y planificar un poco el resto de días de viaje. El tiempo nos está dando un respiro, llueve intermitentemente.
Amance un dia estupendo y hacemos un desayuno potente y damos un gran paseo a Tejo porque nuestra idea es visitar los Castillos del Rey Loco y va a pasar mucho tiempo solo.
Cogemos las bicicletas para desplazarnos, no llueve y además hay un fenomenal carril bici. Füssen cuenta con infinidad de carriles bicis. Durante un poco del trayecto vamos paralelos al río Lech que, en algunos puntos, está completamente desbordado también recorrimos parte del carril bici del lago Forggensee.
Füssen
Nos fuimos a coger las entradas para visitar los castillos, las colas son interminables y, aunque hemos madrugado, la entrada para el segundo de los castillos solo la podemos hacer a las 17, 35 horas. A Ruben le tocaría ir a dar una vuelta a Tejo entre la visita del primer y segundo castillo. Menos mal que la temperatura es agradable y no hace nada de calor.
Si viajáis con perros tener en cuenta está situación. Y si queréis también podéis aparcar en los aparcamientos cercanos.
Así pues vistamos el Neuschwanstein y Hohenschwangau, una gozada y de la misma forma os recomiendo visitar Marienbrücke el puente de la Virgen Maria con unas vistas espectaculares.
Castillos del rey Loco:
Neuschwanstein (castillo nuevo) es el castillo soñado por Luis II desde su ventana del castillo de Hohenschwangau y por ello lo mandó construir en 1869. Su bella silueta sirvió de inspiración para el castillo de la Bella Durmiente de Disney. Sin duda ha merecido la pena disfrutar del lugar para nuestro gusto demasiado masificado y con un turismo, en ocasiones, poco respetuoso y muy de hacerse la foto sin apreciar el entorno. Dudamos si volver a intentar visitar el castillo de Linderhof pero lo descartamos, no queremos sustos.
Al día siguiente cometemos el mayor error de las vacaciones, desviarnos hacia Lienchestein. Uno de los países mas pequeños del mundo, paraíso fiscal y con un turismo mas orientado a los deportes de invierno. Vaduz la capital no llega a los 4000 habitantes y a mi, personalmente, me resulto una ciudad fea. El Castillos de los Príncipes no se puede visitar, se encuentra situado en lo alto de una montaña y arropado por altas montañas que dejan ver sus nieves aunque sea verano.
Lienchestein:
No habíamos podido recopilar suficiente información y nos fiamos de las carreteras de montaña y optamos por ponernos en ruta hacia la Cataratas del Rhin.
Llegamos de noche a las Cataratas, encontramos la indicación de Schaaffhausen la seguimos y enseguida vemos el desvío de Rheinfal. Llegamos a un gran aparcamiento de visitantes de las cataratas, vemos que hay varias autocaravanas aparcadas en una de los lados y aparcamos junto a ellas.
Ruben sale a que Tejo disfrute un poco mientras preparo la cena, hoy cenaremos como si estuviéramos en España, nos han dado las diez de la noche.
Cuando vamos a ir a dormir se escucha una fuerte sirena que suena una y otra vez, nos asustamos, tenemos el miedo de las inundaciones metido en el cuerpo.
Salimos a ver si algunos de los vecinos de autocaravana están despiertos, alguno hay pero solo habla alemán. En pocos minutos comienzan a sonar sirenas de policía y vemos también dos camiones de bomberos. No logramos averiguar que pasaba y nos dormimos con la duda y con el ruido de las cascadas metido en la cabeza.
Al levantarnos y disponernos a visitar las cascadas logramos enterarnos de que la noche anterior un turista se había caído y estaban buscándolo para rescatarle.
La verdad que el salto de agua mas grande de Centro Europa es todo un espectáculo. Son más de 150 metros de salto de agua y este año el caudal supera la media de 700 metros cúbicos de agua por minuto. En el castillo Laufen
se pueden comprar entradas para bajar al nivel de agua de las cataratas. Lo que no hicimos fue montar en ninguno de los barcos, estábamos haciendo la visita con nuestro perro y creo que no le habría gustado.
Tras la visita comimos en el aparcamiento y tras una breve sobremesa arrancamos nuestra autocaravana para irnos al siguiente destino, El cuenta kilómetros parcial nos indica que llevamos recorridos 2.852 kilómetros desde que iniciamos nuestras vacaciones.
Nuestro destino ahora es el lago Titisee, es el mayor de los lago natural de la Selva Negra con mas de 2 kilómetros de largo, 700 metros de ancho y profundidades de mas de 40 metros. El río Seebach que atraviesa el lago.
Sin duda, es un lugar muy turístico rodeado de hoteles, restaurantes y comercios en muchos de ellos podréis ver los relojes de cu-cu. Os recomiendo comeros una porción de tarta de Selva Negra. El lago se puede recorrer en barco. Sorprende estar en pleno mes de agosto y ver comercios con un papa Noel anunciando artículos de navidad.
Encontramos el lugar muy masificado pero, también es que el día acompañaba, lucia el sol, nada de lluvia y se podía decir que incluso hacia calor. Después de la tristeza por las inundaciones los alemanes querían pasar unas horas de distracción y abarrotaban las terrazas y comercios.
Decidimos que no queremos pasar allí la noche porque había bares y mucho alboroto y tras un paseo con la bici decidimos irnos a dormir a Freiburgo.
Freiburgo es la capital de la región, con un plano de la ciudad buscamos el camping que está situado en una zona boscosa y de instalaciones deportivas. Es pequeño y familiar y el precio es muy razonable, 15 euros día y desde allí es posible acercarse al centro histórico en bicicleta. Esta ciudad fue arrasada por las bombas durante la Segunda Guerra Mundial y decidió reconstruirse con un solo propósito en mente: ser la urbe más ecológica y sostenible del mundo.
Nos tomamos el resto de la tarde de relax y de juegos con Tejo, la verdad los kilómetros comienzan a hacer mella, bueno mas que los kilómetros el mal tiempo que hemos tenido.
Al levantarnos y tras el paseo de Tejo no vamos en bici al centro histórico, la ciudad es acogedora y sus gentes amables. Mientras Ruben sube a hacer fotos a la torre de la catedral de 116 metros de altura, junto a Hosana, una de las campanas mas antiguas de Alemania (1258), yo recorro el mercadillo que hay instalado en la plaza donde se ubica (Münsterplatz). Después recorremos sus calles, sus plazas y la verdad, es una ciudad que nos gusto mucho.
Después de comer nos ponemos en marcha, primera parada Furtwangen, queremos ver el museo alemán del reloj.
Después de la visita a la pequeña localidad y al museo nos vamos hacia Triberg pero, antes nos paramos a visitar las cataratas de Wasserfälle. Que no son las cataratas mas altas de Alemania aunque los folletos informativos lo repitan una y otra vez. Tienen 163 metros de caída y las situarín por debajo del puesto quinto. A mi el sitio me recuerda un poco al Monasterio de Piedra.
En la localidad de Triberg encontraremos los relojes de cu-cu mas grandes de Alemania y en sus calles la mayoria de sus comercios están especializados en este tipo de relojes.
Para dormir decidimos buscar un lugar mas tranquilo y lo hacemos frente a una casona típica de la selva Negra, pedimos permiso a los dueños y nos permiten pernoctar sin problemas. Al día siguiente al levantarnos el desayuno se convierte en un momento único e irrepetible. Tejo disfruto muchísimo de aquello prados.
Durante el desayuno hemos planificado la vuelta a casa, la idea es pasar por El Alto de Randel queremos llegar a los Volgos, la idea resulta un fracaso, nos lo impide una señal de tráfico de prohibido a vehículos de mas de 2,20 metros de anchura. Decidimos parar y planificar que hacemos y sobre la marcha optamos por visitar la ciudad de Berna. Dicho y hecho, volvemos a Suiza.
Al llegar aparcamos frente “a la casa de los osos” BärenPark, 2 francos la hora. Aun nos quedaban francos y nos sirvieron.
Visitamos la ciudad, había mercadillo, estaba muy, muy animado. Nos dirigimos hacia el puente de Rirchenfed-br sobre el río Aare, desde donde hay unas maravillosas vistas.
Paseamos por Lauben y tomamos un café en el Café des Pyrénnées y no debéis dejar de visitar uno de los puntos de referencia la Zytglogge o Torre del reloj.
Por la tarde seguimos ruta y comienza a llover y decidimos que no vamos a Ginebra ni tampoco a Lusana, estamos mas que cansados de lluvia, conducimos hasta llegar a la ciudad de Chanbery allí pernoctamos y nos preparamos para regresar a España.
Al levantarnos decidimos que ese día teníamos que llegar a hacer el máximo de kilómetros e intentar llegar a la frontera o muy cerca. Así lo hicimos y llegamos a Perpiñan. Poco antes de llegar aprovechamos una de las maravillosas áreas de las autopistas francesas para vaciar depósitos y cargar agua.
Después de recoger a la pequeña y pasar un odisea para subir y bajar a Farrera ponemos rumbo a Santander, Ruben va a participar en una prueba de agility en Santoña.
Cuando llegamos el día 29 a casa hemos recorrido 4599 kilómetros. Durante los días que estuvimos de viaje no coincidimos con ninguna autocaravana española.
Cualquier duda que tengáis sobre esta ruta, podéis poneros en contacto conmigo en conclicker@gmail.com
Ana Pose